pelicula

No cabe duda de que el séptimo arte es muy subjetivo, y lo que puede gustar a una persona puede disgustar a otra. Eso se aprecia especialmente en los géneros, puesto que quienes aborrecen el cine de terror, por ejemplo, se encuentran en las antípodas de los fans de El excorcista, The Ring o Saw. Sin embargo, no se debe afirmar que una película es mala porque no te guste, ya que puede estar bien hecha y que no te guste. Por eso vamos a intentar definir algunos aspectos que hacen que una película sea «buena», objetivamente.

La calidad técnica es una característica muy apreciada especialmente por los entendidos del cine, ya que en caso de que un film reúna buena fotografía, buen sonido y una ambientación que entre en armonía con el desarrollo de la historia estará contribuyendo a una película mejor hecha. En ocasiones se cae en el exceso, puesto que uno se puede pasar a la hora de cuidarlo todo y se sublima, de manera que parece artificial y poco creíble para el espectador.

Otra característica a tener en cuenta es la originalidad, ya sea en cuanto al argumento o la manera de presentar los contenidos. La mayoría de historias están ya contadas, pero se pueden buscar ángulos diferentes, y no solo de cámara. Hay muchas maneras de distorsionar la historia para sorprender al espectador, con el objetivo de que no se aburra y se sorprenda, ya sea con giros de guion y cambiando el orden habitual de los elementos.

La estética de una película también puede llamar la atención, porque se puede transmitir el contenido de diferentes maneras. Hay quienes optan por las películas de animación, que ya han dejado de tener el aspecto infantil de los dibujos animados. O también se puede tirar hacia una estética de cómic. Lo que sea para conectar más directamente con quien ve la película.